viernes, 20 de diciembre de 2013

Cuento de Navidad....por María José Mallo,desde España.

Al día siguiente era Nochebuena, no podía esperar más. Tenía que pasar a la acción. 
No había nada para cenar. Ayer, se habían acabado las patatas que sacara del contenedor de la basura y hoy habían comido col hervida procedente del mismo sitio. 
El pan, sin embargo, no les faltaba porque su vecina que trabajaba en una panadería, les dejaba en la puerta pan tierno a diario y muchas veces magdalenas o cualquier clase de bollería. 
De las bolsas de comida que les pasaba cruz roja, sólo quedaba leche y cacao para desayunar hasta la llegada de la próxima remesa. Era injusto que ella y las niñas se quedaran sin cena cuando tanta comida se desperdiciaba en casa de los ricos, en casa de los banqueros, en casa de su jefe, sin ir más lejos.
 Ese cerdo que cenaría en familia con sus hijos como un patriarca modelo, como un empresario modelo que había mantenido su negocio de supermercados contra viento y marea y se había convertido en un ejemplo para emprendedores presentes y futuros. El mismo empresario modelo que había despedido, sin contemplaciones, a trece trabajadoras, incluida ella, dejándolas en la calle. 
Teresa, trabajaba en atención al cliente, tenía treinta y ocho años y una antigüedad de seis en la empresa, pero había cometido el error de ponerse enferma, tres días en abril y siete en mayo a causa de una fuerte afonía sobrevenida por los excesos del aire acondicionado y......
.(segui leyendo)

No hay comentarios: