las tizas de colores
y los títeres afelpados.
Una cartera grande
repleta de caramelos,
pinturitas de colores
y cuarenta mariposas.
bañaste a tu perro Pichi,
ese que habla con chicos
cada vez que contás un cuento.
La bolsa con fantasías,
la pusiste en la bici roja,
y pedaleaste con fuerza
hasta la nube más cerca.
Allí, juntaste respuestas
para todas las preguntas
que seguro te esperaban
envueltas en celofán.
Después,volaste a la escuela,
esa,que construyó la gente
ladrillo sobre ladrillo.
emocionada entraste,
abriendo una puerta verde
del color de la esperanza.
Y del bolsillo grande,
de tu blanco delantal
repartiste bondadosa
vocación,saber y dedicación.
Norma Jacomet.
1 comentario:
Que hermosa poesìa, Norma.. en sus lìneas resumiste bellamente el inicio de ese sentimiento que llevan dentro todas las maestras de raza
Felicitaciones!!!
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